…Clara se pellizca la mejilla para comprobar si lo que está viviendo es real o si todo se trata de un lindo sueño del que está a punto de despertar… para su felicidad, se da cuenta que el chico de suaves rizos está parado justo frente a ella, mirándola de una manera dulce y que al igual que el primer día la hace sentir intranquila y observada. Se miraron en silencio por unos instantes. Ella creyó que tenía algún “adorno” en el rostro, se imaginó con algo en los dientes, un intruso en la nariz o cuanta fatalidad existe en este planeta… Clara cree que la nube negra la acecha la mayor parte del tiempo,.
Ella fue la primera en
romper el largo silencio cuando, de repente, un golpe de agua fría moja sus
cuerpos…. Un sujeto en una moto de agua arranca a toda
velocidad mojándolos con el chorro que emana de la parte trasera de la nave, Clara estuvo a punto de maldecir en todos los idiomas habidos y por
haber, pero gracias a sus largas terapias de control de impulsos es que sólo
suelta un:
-Mieeeeerda!! Exclamó la
princesa… La expresión le salió del alma… De inmediato le ofreció disculpas al
chico quién explotó de la risa. Luego del incidente ella aclara la voz y le
dice:
-Y bueno, después de este
accidentado encuentro, ahora si podrías decirme tu nombre... antes que él pueda
responder ella lo interrumpe: ah! Es que yo sólo te conozco como el “chico sexy
de suaves rizos”. Inmediatamente él suelta una risotada. Ella no
parece estar nerviosa, todo lo contrario, ahora es él quien parece cohibido
luego de esa declaración.
-¿Cómo que me conoces?, le pregunta curioso Gus
-A ver, a ver… la curiosa soy ya!! Lo mira de reojo con cara coqueta. En vista que Clara no le contesta, sigue con su respuesta
-Bueno Señorita Sinceridad,
me llamo Gus le contesta esbozando una pequeña sonrisa. Lo que ella le contesta
con tono y gesto de extrañeza ¿Gus?... ¿Gus qué?... ¿Agusto?, ¿Agustín?... me
refiero a cómo te llamas, no como te dicen. Nuevamente esboza una sonrisa
mientras le contesta
-Me llamo simplemente Gus,
ese es mi nombre. Clara avergonzada le pide disculpas y ahora es ella quién lo
invita a dar un paseo por la playa.
-Entonces Gus… ¿te gustaría
dar un paseo por la playa?. Gus con cara de “te pasas” le contesta: -Por
supuesto… me encantaría…-
Clara se revisa el traje de
baño, se siente extremadamente nerviosa, el hecho de estar caminando
prácticamente “en cueros” al lado de su galán y con la creencia de que lo peor
está por suceder… se imagina con una bubbie al aire… por parte baja, pero al
parecer todo estaba bien puesto. Mira de reojo a Gus y su lado cochino piensa
<<y bueeeeno (leánlo en tono Argentino)… él tiene todo mejor
puesto…>>.. ya empezaste Clara… ya empezaste. Ay Dios… esta mujer no
puede evitar que su mente erótica despierte…
Ahora
caminan por la arena mojada dejando las huellas atrás mientras ella le pregunta:
-Señor
de nombre corto, quiero saber cómo supiste mi nombre, la verdad es que siento
mucha curiosidad… cuando me dijiste –Clara… ¿Verdad?...- quedé todo lo que es A
NO NA DA DA. Clara es bastante histriónica para hablar, es por eso que quienes
la conocen saben perfectamente cuando está en uno de sus días como dice ella
“en los que no debería de haberme levantado”, y los días “estoy en llamas”… no por lo que ustedes se imaginan… mentes de alcantarilla!!,
sino que todo para ella es alegría, su mente está más despierta que nunca… esos días en
que los bailes al ritmo del reggeaton
son el invitado principal en la ducha matutina. Su canción favorita para este espectáculo es “Titi me
preguntó” de Bad Bunny, cada vez que le da play no puede entender como le puede
gustar una canción tan vacía, en su lenguaje “la ama con pasión”. Cada mañana que menea el esqueleto al son de esta canción queda como coloquialmente se dice prendida como “televisor de
conserje”.
-Al
parecer las preguntas están recién comenzando Señorita Curiosidad… ¿Quieres la verdad
o te invento una linda historia para no parecer un psicópata?... se sonríe de
manera sexy piensa Clara mientras le responde
–Mmmm
la verdad por supuesto. Si hay algo que no perdono es la mentira. Le contesta
Clara frunciendo el ceño y recalcando muy bien esa frase
-Te
ví el día que fuiste a nadar con los delfines…te… Clara lo interrumpe
nuevamente
-Noooooooo,
¿¿¿¿de verdad????.... ¿No me digas que estabas ahí también? Le contesta ella
con una cara de sorpresa como si se hubiese visto algo extraordinario…
-Si
vieras tú cara te estarías aguantando la risa tal y como lo estoy en este
momento. Déjame continuar… oye pero que mujer más ansiosa!!... Hay dos certezas que tengo sobre de ti: 1- Te llamas Clara. 2- Eres la mujer más ansiosa que he
conocido… y… EN LA VIDA, por cierto (ella se sonroja mientras lo escucha en
silencio)... Ese día llegamos al Dolphin Discovery y tú estabas en una de las
mesas escribiendo muy concentrada en tu celular. Hace una pausa mientras Clara
lo mira atentamente y le dice –continúa… Nos llevaron al sector de chalecos salvavidas,
tú sólo traías puesto el traje de baño… te pusiste el chaleco que por cierto te
quedaba estupendo, mejor no te digo donde se fijó mi mirada (Clara enrojece
como un tomate)… después de esta breve declaración continuo: el chaleco era
cortito, se te veía toda tu anatomía, te notabas insegura… te veías tan
nerviosa, tan tierna… tan indefensa, pero claramente no podías serlo si estabas
en un lugar al parecer sin compañía… y fue ahí cuando me propuse conocerte. Te
miré todo el tiempo que estuvimos en la actividad, gritaste la mayor parte del
tiempo mientras jugabas con el delfín, no aguantaba la risa, todo hasta que
terminó y fuimos a la entrada para comprar las fotos. Me acerqué a ti mientras
veías tú veías las fotos en la computadora, en la parte superior de la pantalla
estaba escrito tu nombre, y fije en tu muñeca que traías puesta la misma
pulsera de este hotel... Fin de la historia!!... termina el relato en forma
repentina. Ella lo miraba como un niño escuchando el mejor cuento del mundo y la
la contempla con una ligera sonrisa.
En
ese preciso momento de romanticismo, Clara es golpeada en la cabeza por una
pelota de fútbol… ayyy mi querida Clara, si no es una cosa es la otra… estaba
tan embobada escuchando a Gus que ni cuenta
se dió que una pelota venía justo hacia su cabeza, el destino tenía
preparado una pequeña sorpresita. Cuando despierta, un grupo de hombrecitos está
hincado su alrededor, pero ella busca desesperada a Gus a quién encuentra
rápidamente por cierto. Un tuluco de servilletas adorna su nariz, se quería
morir!!. La Clara sexy con el bikini color verde flúor y azul eléctrico quedó
en el olvido, ahora sólo era una chica despeinada con el rostro enrojecido y
rastros de sangre, sólo quería ser tragada por el mar, no podía creer que de
todas las personas de la playa, justo le tenía que caer a ella… se acerca uno
de los hombrecillos y con cara de arrepentimiento le dicen:
-Disculpe
señora, no queríamos pegarle… en ese momento Clara sintió que como se dice
vulgarmente “le pusieron un ají en el traste…”, el diablo se apoderó de ella…
no hay nada en la vida que odie más que le digan “señora”… <<grrrrrrr
mocoso insolente!! Que se ha creído!! No tengo anillo, no tengo guagua, estoy
en la flor de la juventud y me viene a decir señora!! AH NO!!>> pensó
clara en sólo 2 segundos, pero no lo dijo jajaja si pudieran leer sus
pensamientos… mmm por su seguridad es mejor que no lo hagan… levantándose
rápidamente le contesta:
-No
te preocupes son cosas que pasan, le contestó. Aunque por dentro tenía un
rosario de cosas por decirle pero al igual que el cómico Jorge Alís, “lo pensó,
pero no lo dijo”. Clara se sintió algo mareada, Gus le pidió que se recostara
en la arena, el hizo lo mismo a su lado y continuaron la charla. Como siempre,
Clara es la primera en hablar…
-Debo
de parecer un desastre… Gus la mira y asiente con la cabeza… Ella le reclama
-tenías que decir que noooooo-. Gus le contesta –Clara, luces fantástico-.
-Que
mentiroso… le dice Clara molesta
-Bueno
entonces que te digo que estas hecha un desastre o que luces fantástica… sonríe
de una manera que hace que a Clara se le olvide el mal rato. ¿Vamos al mar?,
así limpias el desastre fantástico que estás hecha. Clara asiente con la cabeza.
Se olvidan del mareo y corren al mar. Los corazones laten aceleradamente. Las
miradas son cada vez más intensas. Sin buscarse las pieles comienzan a
acercarse. La química entre ellos es indudable. Para variar mi mente erótica interrumpe el
momento…
-No
me has dicho mucho de ti… sólo sé que eres Gus… el chico psicópata, sexy de
suaves rizos, le sonríe de forma coqueta mientras Gus se sonroja. Él le
contesta
-No
me digas eso, que de verdad me lo creo. Clara lo interrumpe (para variar) –sólo
quiero decir algo, nunca nos digamos donde vive cada uno, bueno?-. Gus la mira
con extrañeza quiere respuestas pero ella le cierra las puertas inmediatamente.
Él le responde:
-“No
es quién seas en el interior, son tus actos los que te definen”… Clara notó de
inmediato que era la frase de Bruce Wayne de Batman… después que su Diosa
interior cayó rendida a sus pies pensó –ayyyyy me gustó aún más”… mmmm! Lo
acabo de decir en voz alta?.... (se escucha una risotada)
-Así
es Señorita, lo acabas de decir en voz alta y tus mejillas están rojitas como
una granada… Gus continúa riendo mientras que Clara se siente muy avergonzada
pero prefiere demostrar que sólo fue un impasse.
A
lo lejos en la orilla de la playa, divisan a dos chicos que hacen señas con los
brazos, Gus se da cuenta que son sus amigos, “papi chulo” y “el cara de chiste”
como los llama Clara. –Ven Clara, quiero presentarte a mis amigos- la pide Gus.
Ella sabe perfectamente quienes son, los tiene más que estudiados y milimétricamente
de hecho. Caminan muy juntos hacia la orilla, tanto casi que sus dedos podían
rosarse. Clara podía sentir su corazón latir a mil y sus piernas tambalear
mientras caminaba. A través de las cristalinas aguas, mi dulce chica vió algo en
la arena que llamó su atención, algo brillante que la hizo tropezar. Gus la
sujeto firmemente y luego tomo su mano.
-Lo
siento Clara, te tomaré la mano hasta que asegurarme que llegues sana y salva a
la orilla mientras le guiña el ojo izquierdo. La Diosa interna de mi erótica
muchachita se reía mientras piensa “si me pide perdón para tomarme la mano…
entonces después que hará cuando me quiera hacer maldades… que cochina clara!!
Las cosas que piensas”.
Ahora
tiene justo en frente a ella los tres chicos de la playa: el morenazo, el de
tez Europea y el trigueño… el que ella denominó “cara de chiste” la saluda:
-Hola
Clara, ¿Cómo estás?, me llamo Ignacio… ella de inmediato y al escuchar con
tanta seguridad escuchar su nombre, puede deducir que ha estado en más de una
conversación. En ese instante Clara se distrae y mira hacia el bar, choca su
mirada con un hombre vestido de terno oscuro con lentes también oscuros y que
usa auriculares en el oído izquierdo. Un calor descomunal recorre su cuerpo,
comienza a sudorar y su garganta se aprieta. <<¿Y ahora que harás Clara?...
¿en qué te metiste?... como se te ocurre meterte en líos>>…
-Gus,
¿confías en mí?, le pregunta Clara con tono de desesperación. A lo que él le
contesta:
-¿Qué cosa Clara?, no entiendo. ¿Estás bien?… la mira con cara desconcertado
-Tú sólo hazme caso y corre que yo ya te cuento. Clara lo agarra fuerte del brazo y se alejan del hombre vestido de terno, mientras el hombre la ve y corre tras ellos. Clara no deja de gritar -Corre Gus, corre-…
Jajaja pobre clara, cómo tan mala suerte jajaja muy bueno el capitulo, esperando el próximo!!!!!
ResponderEliminarjajajajaj pronto conoceremos más de Clara. Ya está disponible el cuarto capítulo. Mucjhas gracias por leernos. Saludos
EliminarPucha, y quien es ese hombre de negro??? Bueno,esperaremos el próximo capítulo..
ResponderEliminarHola! ya está disponible el capítulo!! un abrazo
EliminarJajajjaja esta historia está cada vez más interesante ...Me muero por leer el próximo capítulo ,Que pasará???
ResponderEliminarEspero no desilucionarte!. un abrazo
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